De: La Frikipedia, la enciclopedia extremadamente seria.
Querida amiga/color de piel que tienen las mujeres perfectas que salen por la tele? Si este es tu caso, esta es tu guía. Síguela al pie de la letra (¿las letras tienen pies?) y conseguirás todo aquello que siempre has soñado.
Los ojos, ya sean feos o muy feos, siempre pueden resaltase o esconderse (si son muy muy feos) encontrando el color adecuado. A los ojos azules les va estupendamente los tonos negruzcos o cualquier tono vivos como el rojo o el morao. Con los ojos marrones, puedes usar cualquier color, ya que no podemos hacer milagros y tu caso está perdido. Si tu caso son los ojos verdes (que sinceramente, no creo) puedes usar tonos tierra... o sea échate tierra a los ojos.
Antiguamente no existían los avances que hay en la actualidad, y solo teníamos dos posibilidades para maquillarnos: el cabrón y la sangre. Pero hoy en día tenemos miles de posibilidades, y tú ¿eres tan tonta como para seguir usando las sobras y puñetero lápiz? Evoluciona cariño, digo coño.
Lo ideal es usar un pilot del color adecuado para el contorno, si te ronda el párquinson, busca otro método, porque puedes terminar sin ojo y con una enorme pérdida de sangre. No solo podremos pintarnos sin salirnos de la raya, sino que además podremos bañarnos sin que el maquillaje desaparezca. Para los párpados podemos usar un edding de punta gorda. No se recomiendan los rotuladores de los niños, porque tienen muchos camilicetadores, realmente nocivos para los sincócidos oculares. Pero recuerda que si tu color es el moraó, lo mejor es que te des con el pico de una mesa, porque esto es completamente gratis.
Se recomienda depilar bien los alrededores de los labios antes de empezar a pintarlos, ya que no querrás querida amiga, que sobresalga ese antiestético vello púbico por encima del maquillaje.
Centrémonos en primer lugar en el color que mejor te sentará. Esto depende más del momento que de tu cara. Si piensas ir una boda, es mejor usar tonos claritos, porque es muy desagradable ir dejando una mancha roja en la cara de todos tus familiares. Si por lo contrario, te preparas para algo íntimo, mejor no te pintes nada, porque nadie lo verá.
Para pintarnos los labios podemos usar el mismo lápiz de ojos, aunque eso solo vale si nos los queremos pintar de negro. Lo que usan los maquilladores expertos, son las ceras plastidecor, que cuentan con una gran variedad de colores, y además son comestibles. Pero para el verano, con la playa y la piscina, recomendamos una vez más el pilot. Cuanta con una amplia gama de colores que va desde el negro hasta el rojo pasando por el verde.
Baja de arrugas hacen que parezca vieja. Por lo tanto tenemos que hacer todo lo posible para evitar que aparezcan esas horribles arrugas de expresión que aparecen cuando te ríes, cuando te enfadas o cuando tienes algo muy grande en la boca. Para ello se recomienda aplicar uniformemente una capa de unos 5 cm. de espesor de cemento. Si te molesta lo tirante que queda la cara, también puedes usar una mezcla de huevo y harina, pero que quede lo suficientemente espesa para que no se te caiga (no ser recomienda en días de lluvia).
Si has usado cemento para la capa de base, ahora podrás usar cualquier tipo de pintura plástica, aplicándola con brocha o rodillo según el gusto de cada una. Si has usado la harina, puedes meter la cara en la sartén durante 10 min. y conseguirás un bonito tono tostado que los recién llegados de la playa envidiarán.
El colorete es de furcias. Pellízcate las mejillas o mejor aún, que alguien te propine un buen puñetazo. El color moraó es ideal. No solo da un toque juvenil, sino muy moderno. Pero si has seguido bien esta guía, lo mejor es darte color en las mejillas con un tono de pintura plástica ligeramente más oscura, en el momento de aplicar la pintura para el maquillaje.
Aunque lo habréis oído miles de veces, lo repetimos una vez más: "El tipex no vale para pintarse las uñas". Podemos usar gran variedad de métodos, pero si lo que quieres es que no se te vaya el color, durante un mes, te aconsejo que sigas este método. Abre el cajón del escritorio. Coloca las uñas en el borde del cajón, y cierra con fuerza. Esto además ayudará a la renovación de las uñas, que a menudo se quedan bastante hechas polvo con el paso del tiempo. Lo malo es que el color obtenido es el morado. Si queremos un tono rojo, lo mejor es arrancarse las uñas de cuajo. Aunque al final terminan tomando un tono marrón.
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